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martes, 28 de noviembre de 2006

Vídeo de Historia

Nota de Super Agencia 86

Hay una gran unanimidad en la mayor parte de los medios escritos, radiofónicos, televisivos e interneteros de Patriaña al opinar sobre el vídeo que ha realizado el partido político del Gobierno.

Conocidos patrio-periodistas, desconocidos patrio-periodistas, ignorados patrio-periodistas e ignorantes seudo-patrio-periodistas, todos juntos pero no revueltos, como si en un mismo cuartel vivieran, se sienten ofendidos al no poder responder con más mentiras a las afirmaciones que se vierten en el vídeo.

Algunos protagonistas del corto afirman que sus declaraciones son tomas falsas, que no saben cómo se han filtrado, y que son un tortazo directo a sus caritas.

Rapaz, uno de los extras que aparece en el corto, en la actualidad en paro, pide que "le dejen tranqui con su botella de anís", que le den de nuevo el mismo papel, más dinero, más medios, más flequillo, mejor guión y más poder. También amenaza con mandar a su representante Espíritu Publíguez para defenderle ya que, según su convenio, sólo le contrataron como figurante con bigote y utilizaron frases chapurreadas por él mientras hablaba distendido en las sesiones de maquillaje.

La Asociación de Verdades Televisadas, observando la relevancia que ha ocasionado la emisión del corto en la gente, pretende invertir, con el dinero de las subvenciones que recibe, un recontravídeo para intentar paliar la falta de credibilidad motivada al visionar este reportaje y quedar patente que la asociación no ha intentado en ningún momento defender los derechos de los televidentes, callando la verdad y ocultando su intervencionismo.

En estos momentos está publicando en su página web las bases para la adjudicación de la realización del vídeo.

Fuentes poco recomendables comentan que hay sospechas de información privilegiada ya que EPEP, la Empresa Publicitaria Espíritu Publíguez, ya ha presentado el storyboard y se sabe que van a utilizar técnicas de "realidad virtual" con una gran cantidad de efectos generados por ordenador y, a lo mojó, tecnología 4D.

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